Publicidad, término utilizado para
referirse a cualquier anuncio destinado al público y cuyo objetivo es promover
la venta de bienes y servicios. La publicidad está dirigida a grandes grupos
humanos y suele recurrirse a ella cuando la venta directa —de vendedor a
comprador— es ineficaz. Es preciso distinguir entre la publicidad y otras
actividades que también pretenden influir en la opinión pública, como la propaganda o las relaciones públicas. Hay una enorme
variedad de técnicas publicitarias, desde un simple anuncio en una pared hasta
una campaña simultánea que emplea periódicos, revistas, televisión, radio, folletos distribuidos por correo y
otros medios de comunicación de masas. Desde sus
inicios en la edad antigua, la publicidad ha evolucionado hasta convertirse en
una enorme industria.
La publicidad en Estados
Unidos es la primera a escala mundial, no sólo por su volumen, sino también en
cuanto a la complejidad de su organización y técnicas publicitarias. Muchos de
sus métodos han servido de modelo para otros países. La publicidad actual
desempeña un papel crucial en la civilización industrial urbana, condicionando
todos los aspectos de la vida cotidiana. Tras demostrar su enorme poder para
promover la venta de bienes y servicios, la publicidad se viene utilizando
desde la década de 1960 cada vez más para fomentar el bienestar. Las campañas a
favor de la salud y contra el consumo de bebidas alcohólicas son sólo dos
ejemplos de cómo la industria publicitaria puede, en ocasiones, defender tales
objetivos.
Se pueden distinguir dos
importantes categorías de publicidad: la de bienes de consumo, dirigida hacia el
consumidor final, y la empresarial, que apela a los empresarios mediante
periódicos, revistas de economía y otros medios especializados de
comunicación. Ambas utilizan multitud de técnicas para fomentar el consumo. Otra modalidad publicitaria, de
importancia menor, es la institucional, cuyo único objetivo consiste en crear
prestigio y fomentar el respeto de determinadas actividades públicas. Cada año
se gastan enormes sumas de dinero en este tipo de publicidad, que no
suele anunciar bienes o servicios. Otra técnica publicitaria, cada vez más
frecuente, consiste en presentar campañas conjuntas entre el productor y el
vendedor. A veces, cuando se realizan campañas a escala nacional, varios
empresarios comparten un mismo anuncio.
La publicidad puede tener
un alcance local, nacional o internacional. Los precios de una campaña publicitaria
dependerán de su ámbito de implantación. También variarán en función de lo que
se anuncia: formas de ocio, cuestiones legales, políticas, financieras, temas
religiosos o campañas destinadas a recoger donaciones para financiar
actividades caritativas o humanitarias.
II. MEDIOS UTILIZADOS POR
LA PUBLICIDAD
Los mensajes
publicitarios aparecen en diversos medios. De mayor a menor importancia, los
medios que utiliza la publicidad son los periódicos, la televisión, la venta por
correo, las publicaciones de información general, las revistas económicas, las
vallas publicitarias y las revistas destinadas a diversos sectores
profesionales. Más recientemente, Internet se ha convertido en un nuevo canal
publicitario, aunque su rentabilidad está todavía en tela de juicio. Además,
una parte importante de la publicidad se transmite utilizando medios no
destinados a ella de una forma específica, como puede ser un escaparate, el
folleto de una tienda, calendarios, mensajes desplegados con aviones e incluso
hombres-anuncio.
También se utilizan, cada
vez más, medios que, en principio, no se pensaba pudieran servir para anunciar
productos. En la actualidad se muestran mensajes publicitarios en camiones y
furgonetas de reparto, o incluso en autobuses y taxis. Algunas cajas llevan
anuncios de productos distintos a los que contienen. Las bolsas de las tiendas
también son un medio frecuente para anunciar productos o el establecimiento
mismo.
III. PUBLICIDAD DIRECTA
En este ámbito se incluye
toda la publicidad enviada por correo o entregada en persona al consumidor
potencial, sin que para ello se utilice ningún otro medio, como los periódicos
o la televisión. La publicidad directa puede clasificarse en importantes
modalidades: el envío de publicidad postal, la venta por correo o la entrega de
folletos y catálogos.
La principal función de
la publicidad directa por correo consiste en familiarizar al consumidor
potencial con el producto, su denominación, el productor y las ventajas de la
compra, así como informarle de los puntos de venta del artículo. También se
pretende fomentar la venta de los distribuidores manteniendo la clientela y
atrayendo a nuevos consumidores.
Cuando no se produce una
venta directa se requieren otros métodos para inducir a comprar por correo.
Además de la publicidad inserta en periódicos, revistas, radio y televisión,
también se utilizan folletos y catálogos de venta para fomentar la venta por
correo. Este tipo de promociones pretenden vender sin recurrir a agentes
comerciales. La entrega personal de folletos tiene los mismos objetivos que la
publicidad por correo. Estos folletos se reparten de puerta en puerta, a la
salida de las tiendas, o se incluye en paquetes y en las cajas de productos.
La competencia entre los medios para
repartirse el mercado publicitario es enorme, por lo que
las agencias publicitarias desarrollan nuevos procedimientos para vender bienes
y servicios. Entre estas técnicas hay que destacar la mejora de los métodos de
impresión y reproducción de gráficos, adaptándose al formato de los anuncios de
las revistas y de los folletos que se emiten por correo, o la utilización de
colores en los anuncios desplegados en los periódicos y la televisión. Los
anuncios que muestran las vallas publicitarias están cada vez mejor diseñados e
iluminados. Muchas innovaciones provienen de la investigación llevada a cabo
por la industria publicitaria.
IV. INVESTIGACIÓN
Durante el siglo XIX era
muy difícil valorar los efectos de la publicidad. Los anunciantes sólo podían
evaluarlos utilizando las estimaciones del número de lectores de periódicos y
revistas. Cuando se empezaron a utilizar la televisión y la radio para anunciar
productos no existía ninguna medida fiable de la audiencia que tenían estos
medios. Por ello, en 1914 se creó en Estados Unidos la primera agencia
independiente de medición de audiencias, fundada por los principales editores
de periódicos y revistas. Desde aquel año se han creado compañías de este tipo
en casi todos los países.
A partir de entonces se
han seguido desarrollando técnicas para evaluar las audiencias de los medios de
comunicación, debido sobre todo a la
competencia y a la necesidad que tienen las empresas de publicidad de tener una
medida precisa y fiable para evaluar la eficacia relativa de cada medio. Por su
parte, los canales informativos han creado técnicas que les permiten no sólo
saber cuántos individuos ven o escuchan los mensajes publicitarios, sino
también su perfil medio y el lugar donde residen. Los periódicos y las
revistas, ya sea recurriendo a sus trabajadores o contratando a firmas
especializadas, analizan sus audiencias, llegando a saber dónde viven sus
lectores, su nivel de ingresos y educación, sus hábitos de ocio, su edad y número de hijos, etc., y redactan
informes para determinar el potencial comprador de sus clientes en función de
los distintos productos.
Las empresas de radio y
televisión consideran asimismo la composición de sus audiencias con el objeto
de informar a los anunciantes potenciales. También contratan a empresas de
control de audiencias para medir el impacto de sus programas. De forma análoga,
las empresas que difunden sus productos en vallas publicitarias y en medios de
transporte (camiones, furgonetas de reparto, autobuses, entre otros) intentan
medir el número de personas que ven estos anuncios.
Debido a la complejidad
de la industria publicitaria, en la que intervienen factores psicológicos y
otro tipo de variables, es difícil formular afirmaciones tajantes sobre la
eficacia de la publicidad. El control de audiencias es una actividad compleja y
sujeta a polémicas muy intensas.
Una de las principales
técnicas de análisis consiste en la prospección de mercados. Tanto las agencias
publicitarias como los anunciantes realizan exhaustivas y costosas
investigaciones para evaluar la viabilidad de nuevos bienes y servicios antes
de anunciarlos a escala nacional, lo que les obliga a asumir grandes gastos. El
procedimiento más común consiste en realizar encuestas puerta a puerta en
diversos vecindarios con distintos niveles de renta media. En estas encuestas
se muestra a los potenciales consumidores distintas versiones del artículo que
se pretende vender. Si el resultado de la encuesta convence al productor de la
viabilidad de una determinada versión de dicho artículo se procede a
seleccionar el mejor método de publicidad, mostrando distintos anuncios a un
conjunto de posibles consumidores, para que revelen sus preferencias. A
continuación se escogen los dos anuncios más votados y el fabricante empieza a
distribuir una serie limitada del producto, para venderlo a continuación en un
mercado local. A partir de los resultados de esta prueba, el productor-anunciante
decidirá si es conveniente realizar una campaña publicitaria a una escala
mayor.
La cuestión relativa a
las motivaciones que determinan la compra de un producto desafía la imaginación
y el ingenio de los vendedores y presiona a los especialistas en publicidad
para que indaguen en nuevos campos. La prospección de estas motivaciones
intenta encontrar los impulsos inconscientes que determinan las decisiones de
compra. Las agencias publicitarias utilizan los resultados de estos sondeos
para influir en los comportamientos de los consumidores y superar sus
reticencias. Hay quienes critican esta utilización de las motivaciones
personales porque consideran que, además de no ser fiables, no respetan al
consumidor, que no debería ser sometido a este tipo de ataques indirectos para
incrementar las ventas. Sin embargo, muchos expertos en
publicidad consideran que el análisis de estos motivos es sólo un medio para
analizar con más profundidad los factores psicológicos de la actitud del
público. A través de encuestas exhaustivas y de investigaciones, los
publicistas pueden analizar el proceso de venta y averiguar qué factor concreto
indujo al consumidor a comprar un producto. Los analistas intentan averiguar en
qué consistieron estas motivaciones.
V. TÉCNICAS DE PERSUASIÓN
Aunque los expertos
siempre buscan nuevas técnicas de venta, siguen utilizando de un modo
preferente los métodos que, a lo largo de los años, han resultado más eficaces.
Ante todo se trata de ofrecer mayores niveles de ahorro, un trabajo mejor,
seguridad ante problemas de salud o edad, popularidad y prestigio personal, el
respeto de los demás, mayores comodidades y mejoras sociales, en general. La
publicidad moderna no sólo subraya las ventajas del producto, sino también los
beneficios que al adquirirlo obtendrán sus consumidores. Así pues el publicista
no vende cosméticos, sino que brinda belleza, atractivo e ilusión. Para atraer
al potencial comprador de un automóvil, el vendedor no sólo realzará las
características mecánicas del vehículo, sino también la comodidad, la seguridad
y el prestigio que ese modelo proporcionará al comprador.
Las múltiples técnicas de
persuasión dependen del ingenio de su artífice y sólo están limitadas por los
medios de comunicación, algunas restricciones legales y el código deontológico
elaborado al efecto por las propias agencias de publicidad. Una de las técnicas
elementales, utilizada desde la aparición de la publicidad, se basa en la
repetición del mensaje. Por lo general, el publicista intentará captar la
atención del cliente potencial repitiendo sus anuncios. Es frecuente encontrar
el mismo anuncio que se puede ver o escuchar en la televisión y la radio, en
periódicos y revistas, tanto locales como nacionales e internacionales, además
de aparecer en vallas publicitarias, folletos o a la entrada de las tiendas.
Otro instrumento
fundamental que ayuda a aumentar las ventas son las marcas registradas. Los productores gastan
enormes sumas de dinero en crear y consolidar sus marcas como garantía de
fiabilidad y valor. Una marca registrada carecerá de sentido si el productor no
garantiza una alta calidad de sus productos. Cuando el consumidor confía en un
sello comercial, se puede considerar que éste es, en sí mismo, un anuncio
publicitario más, en tanto en cuanto es un medio de garantizar al consumidor
que el producto goza de garantías de calidad. La marca registrada muestra su
eficacia de una forma concreta cuando el productor quiere introducir en el
mercado un nuevo artículo.
El precio es quizá uno de
los mejores anuncios publicitarios, por lo que en determinadas estaciones o con
motivo de una promoción especial es frecuente el uso de palabras como “rebajas”
y “ganga”. Además de estos descuentos suelen hacerse ofertas del tipo
“mucho por muy poco”, o “compre uno, llévese dos”, “prueba gratuita” o “pruébelo
a mitad de precio”. También se fomentan las ventas brindando a los compradores
facilidades de pago.
La publicidad actual
reúne multitud de técnicas de persuasión. Entre estas destacan los anuncios
televisivos y radiofónicos, la utilización de tintas perfumadas, productos
anunciados por personajes famosos, comunicaciones dirigidas a los padres para
que proporcionen a sus hijos una vida mejor y les aseguren un mejor futuro,
reclamos dirigidos a los hijos para que pidan a su madre que compren determinados
cereales para el desayuno, así como la controvertida utilización del miedo, a
veces de modo encubierto y otras en un lenguaje visual muy explícito. El miedo
a la pobreza, a la enfermedad, a la pérdida del rango social o a sufrir una
desgracia logra a veces que las personas adquieran productos concretos, ya sea
un seguro de vida, un coche más grande, cosméticos o compuestos vitamínicos.
VI. ESTRUCTURA DE LA
INDUSTRIA PUBLICITARIA
La industria
publicitaria, que mueve cifras multimillonarias, es un fenómeno relativamente
reciente. El desarrollo de una economía comercial que posibilita la existencia
de una industria publicitaria a gran escala surgió en los países occidentales
en el siglo XIX. Los publicistas de aquella época no necesitaban muchos
empleados. Sin embargo, los editores de revistas y periódicos sufrían muchas
dificultades para vender todos los espacios publicitarios de sus publicaciones,
por lo que contrataron a vendedores especializados en esta labor. Estos
vendedores fueron los primeros agentes profesionales de publicidad. Las
agencias publicitarias actuales siguen siendo vendedores de espacios en tanto y
en cuanto los adquieren para los anunciantes. Sin embargo, cobran comisiones de
los medios de comunicación que contratan. De hecho, esta comisión es una parte
fundamental de los ingresos de estas agencias. Sus crecientes costes las han
obligado a cargar sobre los productores parte de estas tarifas cuando sus
comisiones son insuficientes. Este método es cada vez más común y se utiliza
sobre todo en aquellas actividades en las que no se contratan espacios
publicitarios, como por ejemplo en el análisis y prospección de mercados, y en
las actividades de relaciones públicas.
La compra de espacios
publicitarios es sólo una de las muchas facetas que atienden las actuales
agencias, aunque es una actividad cada vez más especializada. La agencia
utiliza gran parte de su tiempo en planificar, crear y producir los anuncios
para sus clientes. Es habitual que cuenten con un gran número de ejecutivos y
creadores. Entre éstos hay especialistas en marketing, diseñadores, guionistas,
artistas, economistas, psicólogos, investigadores, analistas de medios,
probadores de productos, bibliotecarios, contables y matemáticos. Hay un
numeroso grupo encargado de controlar, desde principio a fin, el proceso del
trabajo hasta que se obtiene el producto final.
El crecimiento de las
empresas de radio y televisión como medios para anunciar productos requería la
creación de nuevos departamentos encargados de comprar en estos medios espacios
publicitarios, que permitiera la difusión de anuncios en los telediarios, en
las series de televisión y en todos los demás programas. El departamento
encargado de comprar estos espacios también es responsable de la adquisición y
producción de los anuncios, que suelen realizarse en estudios independientes.
Simplificando, se puede
describir la relación entre anunciante y agencia publicitaria de la siguiente
manera: el anunciante presenta a la agencia el artículo o servicio que quiere
vender, así como su precio. La agencia, siempre con la conformidad del
anunciante, crea y produce el anuncio, establece un presupuesto, selecciona los medios de
comunicación que estima apropiados y el calendario de la campaña.
El volumen de negocios
que mueve la publicidad puede reflejarse mostrando los gastos en publicidad de
una empresa líder en su sector. En el caso español, el grupo Telefónica y El
Corte Inglés encabezan desde hace tiempo el gasto publicitario. Ambos superan
los diez mil millones de pesetas, 60 millones de euros, en inversión al año. En
Estados Unidos estas cifras se multiplican casi por veinte. Sólo La Procter
& Gamble Manufacturing Company invirtió en un año más de 1.300 millones de
dólares (1.450 millones de euros) para vender jabones, detergentes, productos
alimenticios, pasta de dientes, artículos de baño y otros productos
distribuidos a escala mundial, utilizando periódicos, revistas, anuncios en
radio y televisión y otros medios.
VII. EFECTOS ECONÓMICOS Y
SOCIALES
Debido a que muchas
empresas utilizan una u otra forma de publicidad casi todo el mundo ve o
escucha anuncios a diario. El elevado coste per cápita de la publicidad ha
llevado a muchos analistas a atacar esta industria alegando que es innecesaria,
mentirosa, manipuladora y derrochadora. Estos críticos suelen afirmar que la
industria publicitaria eleva de forma artificial e innecesaria el coste de los
bienes y servicios que anuncia. Los defensores de la publicidad reconocen la
veracidad de algunas de estas críticas, pero alegan que, al interesar a los
consumidores, la publicidad permite a los productores vender cantidades
mayores; este mayor volumen de ventas permite a su vez que las empresas
reduzcan los costes unitarios de los productos aprovechando las economías de escala.
Según los grandes
empresarios y numerosos economistas, la publicidad desempeña un papel crucial
en el desarrollo de mercados de bienes de poco valor. Existe al menos un
estudio a escala mundial sobre los gastos de cada país en publicidad, y en él
se demuestra que existe una correlación directa entre ésta y el nivel de vida,
lo que refrenda la teoría anterior.
La publicidad proporciona
también grandes ingresos a los principales medios de comunicación. La industria
que realiza los anuncios para televisión y radio depende de las agencias de
publicidad. Los periódicos y revistas obtienen asimismo cuantiosos ingresos
gracias a la publicidad.
VIII. REGLAMENTACIÓN
Antes de que la industria
publicitaria estuviera organizada, las prácticas abusivas y poco éticas de
algunas agencias provocaron la promulgación de numerosas leyes y restricciones
legales. Estas normas contemplaban otro tipo de actividades además de las
industriales, en particular los concursos. Este tipo de leyes varía según los
países. En algunos, los medios de comunicación de masas autorregulan la clase
de productos que quieren anunciar, prohibiéndose por ejemplo anunciar
cigarrillos o alcohol. A pesar de ello, o tal vez debido a la variedad de
leyes, las agencias publicitarias crean sus propios códigos deontológicos y
realizan un importante esfuerzo para evitar abusos. Estos códigos intentan
evitar el mal gusto, pero buscan también garantizar una mínima solvencia
informativa, así como evitar las imitaciones fraudulentas.
Las asociaciones
publicitarias buscan garantizar la calidad y la veracidad de sus mensajes
porque piensan que es una forma de mantener la confianza del público, esencial
para asegurar la eficacia de toda publicidad.
Los medios de
comunicación de masas, tanto en el plano individual como en el colectivo,
elaboran códigos deontológicos. Algunos periódicos y revistas se niegan a
publicar anuncios de tabaco o bebidas alcohólicas; la mayoría, en mayor o menor
medida, analiza la veracidad de los anuncios antes de difundirlos. Algunos
editores aplican reglamentos estrictos sobre la presentación de los anuncios
para evitar publicar falsedades o exageraciones, garantizando así su
credibilidad y su línea independiente.
Las emisoras de radio y
televisión también realizan un estudio previo de la empresa y los productos que
anuncian antes de difundirlos, en un intento de evitar reacciones negativas.
Estas emisoras cuentan con departamentos especializados que analizan los
anuncios que van a emitir, pudiendo rechazarlos o exigir que se supriman
determinados mensajes. Los editores de revistas se someten a reglas estrictas
para aceptar anuncios.
IX. HISTORIA
Los orígenes de la
publicidad se remontan a la antigüedad: uno de los primeros métodos de
publicidad consistía en pintar los anuncios en los muros. Los arqueólogos han
encontrado numerosas muestras de esta técnica, en especial en la antigua Roma y en Pompeya. Un anuncio desenterrado en Roma
informa sobre un terreno puesto a la venta y otro encontrado en una pared de
Pompeya anuncia una taberna situada en otra ciudad.
Durante la edad media se desarrolló una técnica simple
pero muy efectiva, que consistía en anunciar de viva voz eventos y productos,
gracias a los pregoneros, personas que leían noticias en público o comerciantes
que anunciaban sus productos.
Aunque hay anuncios
gráficos desde la antigüedad, la publicidad impresa no se desarrolló en
realidad hasta la aparición de la imprenta. La marca registrada mediante un
signo bidimensional o tridimensional que simboliza una empresa o un producto
apareció por primera vez en el siglo XVI, cuando los comerciantes y los
miembros de los gremios empezaron a mostrar estos símbolos
a la entrada de sus tiendas.
Las empresas que
comercializaban medicamentos patentados crecieron mucho a partir de finales de
la década de 1870 gracias a la publicidad inserta en periódicos y revistas.
Delimitaron un gran mercado debido a que era difícil encontrar médicos en las
áreas rurales, por lo que los colonizadores y los granjeros tenían que
automedicarse. Los vendedores de fármacos obtenían beneficios cercanos al 90%,
por lo que podían pagar la publicidad de sus recetas. Entre los primeros
anunciantes también figuraban de un modo destacado las empresas de
ferrocarriles y de transporte marítimo de Estados Unidos que informaban, además
del lujo y la comodidad de sus servicios, de los horarios y las tarifas.
A finales del siglo XIX
muchas empresas estadounidenses empezaron a vender sus productos en envases que
llevaban impresa la marca. Este hecho marcó un hito en la historia de la
publicidad, puesto que antes los productos domésticos como el azúcar, el jabón,
el arroz, la melaza, la mantequilla, la leche, la manteca, las alubias
(frijoles), los caramelos, dulces y alimentos en escabeche se vendían a granel.
Los consumidores no habían conocido hasta entonces al productor.
Los primeros en utilizar
esta técnica fueron los vendedores de jabones y detergentes. Entre los primeros
(que datan de 1880) destacan Ivory, Pears' y Colgate. Pronto siguieron su
ejemplo otras empresas, como la Royal Baking Powder, la Quaker Oats y los
bolígrafos Waterman. A principios del siglo XX surgieron marcas tan conocidas
como Coca-Cola.
Tras la I Guerra Mundial, la industria
publicitaria estadounidense creció hasta el punto que se convirtió en la marca
registrada de los propios Estados Unidos. Este crecimiento se vio impulsado por
numerosos avances tecnológicos; el crecimiento de la industria estadounidense
provocó nuevos inventos y mejoras técnicas que beneficiaron a otros sectores
económicos.
La aparición de la
electricidad contribuyó a la creación de anuncios luminosos; el fotomontaje y otras mejoras en las técnicas
de impresión ayudaron tanto a editores como a los departamentos de publicidad
de periódicos y revistas. La publicidad empezó a contratar a especialistas en
relaciones públicas. La aparición de la radio en la década de 1920 estimuló una
nueva técnica de venta que utilizaba la voz como reclamo.
El invento más
significativo de la posguerra fue la televisión, un medio que forzó a la
industria publicitaria a mejorar sus técnicas comerciales utilizando medios
visuales y sonoros. En la década de 1990 destaca la generalización del uso de
reproductores de vídeo y de mandos a distancia para éstos y para las
televisiones. Las agencias de publicidad consideraron una amenaza esta
generalización porque los espectadores pueden borrar los anuncios cuando graban
programas o pasarlos a alta velocidad cuando ven una cinta grabada; además, la
existencia del mando a distancia modifica también la conducta del televidente,
al poder éste cambiar inmediatamente de cadena o quitar el sonido en tanto se
emitan los anuncios (zapping). Por ello, las agencias de publicidad han
cambiado de técnica, e intentan ahora patrocinar los espacios de la
programación. La generalización de redes internacionales de informática, como Internet, compensa en parte estas
dificultades al ofrecer un nuevo medio específico para publicar y difundir
anuncios.
Preguntas y respuestas sobre el material o folleto anterior
sobre Publicidad. Las respuestas están más adelante.
Primer
Cuestionario de Publicidad
1-¿Qué es Publicidad?
2-¿Cuál es el objetivo de la Publicidad?
3-Diga la diferencia entre Publicidad, Propaganda y Relaciones Públicas.
4-Diga los medios e instrumentos que utiliza la Publicidad.
5-¿Por qué la Publicidad de los Estados Unidos es considerada como la primera a
escala mundial?
6-¿Cuáles categorías podemos distinguir en la Publicidad?
7-¿Qué es la Publicidad Directa?
8-¿En qué se basa la Publicidad Moderna para persuadir al consumidor?
Segundo
Cuestionario de Publicidad
1-¿De
dónde provienen los grandes ingresos de los medios de comunicación?
2-¿La
Publicidad tiene las mismas leyes y reglamentos en todos los países? Responda
Si o No y explique su respuesta.
3-¿Qué
propósitos buscan las leyes y reglamentos sobre la Publicidad?
4-¿A
que tiempo se remonta la historia de la Publicidad?
5-¿Cómo
era la Publicidad en la Edad Media?
6-¿Qué
sucedió a finales del Siglo XIX que marcó la Publicidad?
7-¿Qué
sucedió con la Publicidad después de la Primera Guerra Mundial?
8-¿De
qué manera favoreció a la Publicidad la aparición de la Electricidad?
9-¿De
qué manera se beneficio la Publicidad con los inventos de la Televisión y la
Radio?
Respuestas:
Primer
Cuestionario de Publicidad
1-¿Qué es
Publicidad?
El
termino publicidad es utilizado para referirse a cualquier anuncio destinado al
publico y cuyo objetivo es promover la venta de bienes y servicios.
2-¿Cuál es el objetivo de la Publicidad?
Llamarle
la atención al público objetivo y fijarle al prospecto el deseo, la necesidad
de comprar el producto o servicio sobre los demás.
3-Diga la diferencia entre Publicidad,
Propaganda y Relaciones Públicas.
La publicidad
busca un objetivo comercial, la propaganda busca beneficios políticos y/o
económicos y las relaciones públicas más bien quieren vender una buena imagen
de la institución.
4-Diga los medios e instrumentos que
utiliza la Publicidad.
Son los periódicos, la TV, la venta por
correo, las publicaciones de información general, las revistas, las vallas
publicitarias y mas recientemente el Internet.
5-¿Por qué la Publicidad de los Estados
Unidos es considerada como la primera a escala mundial?
La publicidad en EEUU es la primera a escala mundial por su volumen,
su complejidad, organización y técnicas publicitarias. La publicidad actual
desempeña un papel crucial en la civilización industrial urbana, condicionando
todos los aspectos de la vida cotidiana.
6-¿Cuáles categorías podemos distinguir
en la Publicidad?
Las
de bienes de consumo, dirigida hacia el consumidor final y la empresarial, q
apela a los empresarios mediante periódicos, revistas etc. Ambas utilizan
multitud de técnicas para fomentar el consumo.
7-¿Qué es la Publicidad Directa?
Es
la publicidad entregada por correo o
entregada personal al consumidor potencial, sin utilizar otro medio.
8-¿En qué se basa la Publicidad Moderna
para persuadir al consumidor?
La publicidad moderna no solo subraya las ventajas del producto,
sino también de los beneficios q al adquirirlo tendrá, el publicista brinda
belleza, atractivo e ilusión. Repetir el mensaje en los diferentes medios,
darle fiabilidad a la marca, el precio y la controvertida utilización del
miedo.
Segundo
Cuestionario de Publicidad
1-¿De dónde
provienen los grandes ingresos de los medios de comunicación?
De la publicidad, la industria que realiza
anuncios para televisión y radio; periódicos y revistas depende de las agencias
de publicidad.
2-¿La Publicidad tiene las
mismas leyes y reglamentos en todos los países? Responda Si o No y
explique su respuesta.
No, los medios de comunicación de masa, tanto
individual como colectivo, elaboran códigos deontológicos, es decir, que hasta
cada agencia tiene derecho a crear su propias reglas. La mayoría analiza la
veracidad de los anuncios antes de difundirlos.
3-¿Qué propósitos buscan las
leyes y reglamentos sobre la Publicidad?
Evitar mensajes engañosos, o publicar
falsedades o exageraciones. Con el propósito de que el medio pierda la
veracidad y confianza del cliente.
4-¿A que tiempo se remonta
la historia de la Publicidad?
A la antigüedad.
5-¿Cómo era la Publicidad en
la Edad Media?
Consistía en anunciar en voz alta eventos y
productos, pregoneros eran las personas que anunciaban noticias en público
6-¿Qué sucedió a finales del
Siglo XIX que marcó la Publicidad?
Muchas empresas estadounidenses empezaron a
vender sus productos en envases que llevaban impresa la marca.
7-¿Qué sucedió con la
Publicidad después de la Primera Guerra Mundial?
Los EEUU se convirtió en el eje de la
publicidad, impulsada por grandes avances tecnológicos: la aparición de la
electricidad, nuevas técnicas de impresión
8-¿De qué manera favoreció a
la Publicidad la aparición de la Electricidad?
Contribuyó a la creación de anuncios
luminosos
9-¿De qué manera se
beneficio la Publicidad con los inventos de la Televisión y la Radio?
Le permitió a la publicidad utilizar medios
visuales y sonoros para difundir sus mensajes.